Tener una casa cómoda, cálida y sostenible es posible
En estos días finales pero intensos en frío de este invierno buscamos siempre cómom lograr que nuestro hogar esté más cálido pero sin sacrificar la salud ni la sostenibilidad. Hoy te contamos como conseguir casar las energías naturales, la temperatura en el hogar y la comodidad para que sea el refugio que necesitamos.
Energías naturales
Las energías naturales, como la solar y la eólica, ofrecen una alternativa sostenible a las fuentes tradicionales. Integrar estas tecnologías en el hogar no solo reduce la dependencia de fuentes no renovables, sino que también contribuye a la mitigación del cambio climático.
La energía solar, capturada a través de paneles solares estratégicamente colocados en techos, proporciona una fuente de calor natural y sostenible. La instalación de paneles solares no solo disminuye la factura de energía a largo plazo, sino que también reduce la huella de carbono del hogar.
Asimismo, la energía eólica, obtenida mediante turbinas de viento, puede convertirse en electricidad limpia. La ubicación adecuada de estas turbinas, ya sea en el hogar o en la comunidad, puede generar una fuente constante de energía renovable.
Smart heat sensor on the white wall.
La temperatura adecuada
La temperatura en el hogar no solo afecta nuestro confort, sino también nuestra salud. Se ha demostrado que mantener una temperatura adecuada tiene beneficios para el sistema inmunológico, la calidad del sueño y el bienestar general. Según la OMS, la temperatura ideal para una casa debe oscilar entre los 18°C y 24°C por lo que deberíamos movernos en esa horquilla. Para lograrlo hay algunos consejos que pueden ayudarte:
– Aprovecha la energía solar utilizando cortinas y persianas para regular la entrada de luz. Durante el día, permite que la luz del sol entre para aprovechar su calor natural.
– Un buen aislamiento. Asegúrate de que tu hogar esté adecuadamente aislado para evitar pérdidas de calor en invierno y mantener un ambiente fresco en verano. Considera la instalación de ventanas de doble acristalamiento y la aplicación de selladores para grietas y rendijas.
– Termostatos inteligentes para ajustar la temperatura de manera eficiente, adaptándola a tus necesidades y horarios. Programa tu sistema de calefacción para disminuir la temperatura durante las horas en las que no estás en casa, ahorrando así energía.
– Ventilación Controlada para garantizar un flujo constante de aire fresco sin comprometer la temperatura interior. La ventilación controlada (no más de 10 minutos y en 2 momentos del día mañana y tarde-noche) mantiene un ambiente saludable, evitando la acumulación de humedad y la formación de mohos.