6 Consejos para convivir con el calor de verano
El calor puede ser desafiante, pero con las precauciones adecuadas, puedes mantenerte fresco y seguro. El calor extremo puede ser una experiencia abrumadora y peligrosa si no tomamos las precauciones adecuadas. Con el aumento de las temperaturas globales, es fundamental aprender a gestionar y mitigar los efectos del calor en nuestras vidas diarias.
Siguiendo estos consejos que hoy te traemos, estarás mejor preparado para enfrentar las altas temperaturas y disfrutar del verano sin comprometer tu salud. Recuerda siempre escuchar a tu cuerpo y actuar rápidamente. La prevención es la clave para evitar los efectos más negativos del calor extremo.
Mantente hidratado siempre
El consejo más importante para enfrentar el calor es mantenerse bien hidratado. El cuerpo humano se compone en su mayoría de agua y necesita una cantidad adecuada de líquido para funcionar correctamente, especialmente en climas cálidos. Bebe agua regularmente, no esperes a tener sed para beber agua. La sed es una señal de que ya estás deshidratado. Lleva siempre contigo una botella de agua y bebe a intervalos regulares.
Es importante evitar las bebidas azucaradas y el alcohol ya que pueden deshidratarte aún más. Opta por agua, infusiones sin cafeína o agua de coco, que también puede ayudarte a reponer electrolitos.
Consume alimentos ricos en agua como la sandía, el melón y las naranjas, y verduras como el pepino y el apio, tienen un alto contenido de agua y pueden ayudarte a mantenerte hidratado.
Usa ropa ligera y holgada
La elección de la ropa puede marcar una gran diferencia en cómo te sientes en climas cálidos. La ropa adecuada puede ayudar a mantener tu cuerpo fresco al permitir una mejor circulación del aire y evaporación del sudor. Opta por tejidos ligeros y transpirables como el algodón y el lino que permiten que el aire circule y absorben el sudor, manteniéndote fresco.
Usa colores claros que reflejan la luz del sol y te mantienen más fresco ya que los oscuros absorben más el calor. Además de los colores también ayuda llevar la ropa holgada ya que permite una mejor ventilación que la ajustada que atrapa el calor y dificulta la circulación alrededor de tu cuerpo.
Limita la actividad física
Durante los días de calor extremo, es recomendable limitar la actividad física intensa, especialmente al aire libre. El ejercicio aumenta la temperatura corporal y puede llevar a un golpe de calor si no se maneja adecuadamente.
Haz ejercicio en las horas más frescas, temprano en la mañana o al anochecer, cuando las temperaturas son más bajas. No olvides descansar con frecuencia, más de lo que durante el resto del año suelas hacer, y que esos descansos sean a la sombra. Y como siempre, escucha a tu cuerpo, si te sientes mareado, débil o excesivamente sudoroso, detente inmediatamente y busca un lugar fresco para descansar y rehidratarte.
Fresquito en casa
Mantener tu hogar fresco es esencial para sobrellevar las altas temperaturas pero tienes algunos recursos que pueden ayudarte como el uso de ventiladores y aire acondicionado. En el caso de este último es mejor tenerlo a una temperatura constante (por encima de los 22 grados) pero constante y además ejecerás un consumo más sostenible y eficiente.
Otra de los trucos es mantener las cortinas y persianas cerradas durante el día para bloquear la luz solar directa y reducir el calor en el interior de tu casa. Y en horarios vespertino y nocturno pon en marcha una ventilación cruzada. Abre ventanas en lados opuestos de tu casa para permitir que el aire circule y cree una brisa refrescante.
Protege tu piel del sol
La exposición excesiva al sol no solo puede aumentar la temperatura de tu cuerpo, sino que también puede causar quemaduras solares y otros daños en la piel. Protégete adecuadamente cuando estés al aire libre usando protector solar y renuévalo cada dos horas, o después de nadar o sudar.
Es el momento de usar esos complementos que tanto nos gustan como sombreros y gafas de sol que protegen tu cara y ojos de la radiación solar.
Identifica un golpe de calor
El golpe de calor es una emergencia médica que requiere atención inmediata. Conocer los signos y síntomas puede salvar tu vida o la de alguien más. Los síntomas del golpe de calor son temperatura corporal extremadamente alta (por encima de 40°C), piel caliente y seca, confusión, pérdida del conocimiento, y convulsiones.
Si sospechas que alguien tiene un golpe de calor o tú mismo, busca ayuda médica de inmediato. Mientras esperas, trata de enfriar a la persona llevándola a un lugar sombreado, aplicando paños húmedos y fríos, y ofreciendo agua si está consciente.
Esperamos que con estos consejos puedas disfrutar del verano ansiado pero caluroso que nos espera.